Opinión

Cánceres sociales que están enfermando al presente

3 pilares de la colonización cultural

Estos cánceres son muchos, pero por mencionar los que nos atacan cotidianamente podemos considerar tres categorías, la primera  es mental a partir de los medios de entretenimiento, la segunda es física, es decir afectan nuestro interior a través de la alimentación e ideológicas que impactan directamente con la imposición de la propia construcción social.

Cáncer mental

Es común en la actualidad que nuestra mente este condicionada por entretenimientos huecos que consumimos diariamente en los sistemas de streaming, televisión abierta, el cine y las plataformas de video. Los contenidos de estos productos audiovisuales o es repetitivo de viejas historias obsoletas o presenta nuevas ficciones siempre con la misma trama de acuerdo a su género, pero bajo visiones superficiales que no invitan a cuestionar la realidad o nuestra propia forma de vida, que no reta las estructuras impuestas y que posiciona ideas falsas que generalmente vienen de afuera, de otras culturas e historias que buscan siempre dignificar a las sociedades poderosas y menospreciar las culturas autóctonas, despreciando regularmente su riqueza cultural como la de nuestro país.

Nos reflejan con estereotipos a modo, para generar una visión de nosotros mismos siempre inferior a nuestra realidad, nuestra construcción ideológica y por supuesto desconociendo la dignidad de nuestra historia.

Esto lamentablemente no solo se produce en el extranjero, los propios productores masivos nacionales tienen una idea muy pobre de nuestro país, como hemos comentado en anteriores videos, repiten estereotipos y creencias impuestas por producciones de otros países y no buscan reflejar la realidad, sino replicar las ideas artificiales del otro, siempre huecas, siempre obsoletas.

Cáncer físico

Además de lo que consumimos cotidianamente en forma de entretenimiento, esta toda la toxicidad que consumimos en nuestra alimentación y nuestro sedentarismo casi obligatorio que nos imponen las jornadas laborales extenuantes y esclavizantes. Los alimentos procesados que se imponen en las cadenas multinacionales o en las tiendas manejadas en cada esquina por los dueños de la coca, llámese “oxxos” han impuesto el consumo de alimentos dañinos a nuestro organismo, el consumo exagerado de bebidas carbonatas con exceso de azúcar que contribuyen a que nuestro país tenga el primer lugar de muertes por diabetes en el mundo. 


La forma de vida que nos somete a una productividad forzada que nos arrebata el tiempo para pensar en nosotros mismos nos obliga a consumir productos carentes de cualquier nutriente valioso para nuestro cuerpo, es una imposición también creada por las estructuras económicas que usan nuestra fuerza de trabajo masiva, pero que nos quitan la capacidad de poder repartir esta generación de riqueza a todos los sectores sociales.

Cáncer ideológico

Este lo tenemos lamentablemente impregnado en esta forma de percibir la modernidad impuesta también por los sistemas económicos, que genera sociedades esclavizadas, siempre en función de mantener los privilegios de los dueños de los capitales, sus recursos a costa de las voluntades y explotación de los trabajadores.

Esta misma estructura nos aleja de la búsqueda de encontrar nuestras raíces profundas, de comprender nuestra historia y sus procesos sociales, esta distancia nos impide encontrar la dignificación de nuestra idiosincracia autóctona, nos aleja de mantener y fomentar nuestras tradiciones, pero además nos hace olvidarnos de nuestro origen, generando un abismo entre nosotros que nos hace borrar la cohesión social indispensable para el desarrollo.


Incluso nos hace creer que nuestra concepciones más profundas , nuestro bienestar solo están en función del consumo, que nuestros pensamientos deben ser medidos por los que vienen de afuera, que nos despoja de la capacidad de creer no solo en nuestros pensamientos sino también en nosotros mismos.


Nos despojan incluso de nuestra emocionalidad, nos alejan de nuestros lazos profundos, de nuestra intuición natural, en pocas palabras de nuestro propio corazón.


Cómo erradicar estos cánceres

Estos cánceres sin embargo son muy fáciles de eliminar si tenemos conciencia de ellos y fortalecemos nuestra voluntad individual y colectiva para erradicarlos.


La respuesta está en nuestras manos, dejemos de consumir contenido de entretenimiento que no aporte nada a nuestro pensamiento, que no construya, que no fomente el pensamiento y que no nos invite a cuestionar nuestro presente. 

Cuidemos nuestros horarios de descanso, nuestra alimentación para evitar los alimentos que no nos nutren pero si nos intoxican, finalmente encontrémonos como individuos, dignos y valiosos, generemos la empatía en los que podemos fortalecernos en conjunto, reconstruyamos nuestra identidad colectiva a partir de la solidaridad, cercanía, entendimiento y aprecio por el otro, por muy distinto que sea su pensar, privilegiemos nuestro lado humano, nuestro sentir para poder reconectarnos como sociedad, no necesitamos un líder que nos arrastre con palabras e ideas, solo necesitamos conciencia cotidiana y dignidad para dar valor a cada uno de nuestros días.

Artículos Relacionados

México y el Papa

El amor no es una marcha victoriosa; es un frío y roto...

Devaluación, endeudamiento y hambre: fracasa el libertario Javier Milei en Argentina

Más allá de las acusaciones, algunas con fundamento, de la inestabilidad mental...

Más youtuberos

En el año 2017, cuando mi hermano Pablo se encontraba viviendo transitoriamente...

León Gieco | Cinco historias, cinco canciones

Se ha hablado en este mismo espacio de la caterva de adolescentes...