El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, respondió contundentemente al Senado de Estados Unidos tras el rechazo del acuerdo bipartidista para endurecer las leyes contra los migrantes, sentenciando que México “no es piñata” de nadie.
Durante su conferencia matutina, el mandatario lamentó el uso político-electoral del tema migratorio y advirtió que México no permitirá que se utilice como moneda de cambio en el juego político.
“El Congreso de Estados Unidos rechazó una propuesta que presentó el presidente Biden en materia migratoria porque todo es político electoral y quieren utilizar, cosa que no vamos a permitir”, destacó López Obrador.
El presidente señaló que la propuesta demócrata era más enérgica, incluyendo el cierre de la frontera, mientras que los republicanos la rechazaron con el fin de mantener una postura “antimigrante” que les beneficie políticamente.
Subrayó la sensibilidad del tema migratorio y reiteró que su gobierno no permitirá que se utilice como una bandera política, ya que cada reforma afecta a cientos de connacionales.
López Obrador hizo un llamado a los ciudadanos a votar por aquellos partidos políticos que se comprometan a regularizar la situación migratoria, enfatizando que este compromiso debería extenderse a todas las nacionalidades, no solo a los mexicanos.