El Presidente Andrés Manuel López Obrador se ha pronunció enérgicamente contra los recientes ataques por parte de los congresistas republicanos en Estados Unidos hacia México. La Cámara de Representantes, actualmente dominada por una mayoría republicana, tomó la controvertida decisión de frenar más de 60 millones de dólares en proyectos destinados a ayudar a México. Esta medida se ha justificado como una represalia por la supuesta falta de voluntad del Gobierno mexicano en el combate al tráfico de fentanilo.
Con ironía, el presidente de México ironizó que no les estamos pidiendo nada a los estadounidenses.
El mandatario mexicano ha calificado esta acción como “politiquería” y “propaganda vil y corriente”, destacando su creencia de que esta decisión está motivada por la cercanía de las elecciones de 2024 en Estados Unidos. López Obrador señaló que los políticos estadounidenses están utilizando asuntos delicados como el tráfico de fentanilo y la migración con fines puramente políticos, buscando engañar a los ciudadanos estadounidenses con una estrategia desgastada y tendenciosa.
El presidente ha instado a los legisladores estadounidenses a centrarse en cuestiones más urgentes, como la aprobación de planes de apoyo a países que enfrentan crisis económicas, sociales y políticas que obligan a sus ciudadanos a emigrar. Además, criticó el hecho de que se destinen enormes sumas de dinero a la guerra en Ucrania mientras se recortan recursos para América Latina y el Caribe, calificando esta decisión como “ridícula”.
López Obrador también hizo hincapié en la cooperación de México con la región, destacando la ayuda de 150 millones de dólares destinados a Centroamérica y el Caribe. En contraste, cuestionó la negativa de Estados Unidos a proporcionar 50 millones de dólares, subrayando que México no ha solicitado dicha ayuda.
El presidente mexicano cerró su mensaje instando a los legisladores estadounidenses a enfocarse en atender las necesidades de sus jóvenes, ofreciendo educación gratuita, empleo y apoyo, en lugar de culpar a México por problemas relacionados con el fentanilo. Destacó su preocupación por la pérdida de vidas jóvenes en Estados Unidos debido al consumo de esta sustancia y sugirió que los políticos deberían abordar el problema en lugar de utilizarlo como un tema de campaña.
En última instancia, López Obrador concluyó con un toque de humor al señalar que la cantidad de dinero que Estados Unidos no proporcionará a México no será suficiente para cubrir la nómina del país.