El presidente electo de los EEUU, Donald Trump, todavía no llega a la Casa Blanca y ya está provocando un alboroto de proporciones internacionales.
El nerviosismo se hizo patente sobre todo en Canadá, luego de que Trump amenazó de aplicar aranceles del 25 por ciento. Las cosas empeoraron cuando el republicano se burló de Trudeau, durante una cena en su suntuosa propiedad de Mar-a-Lago, proponiéndole que su país se convierta en un estado más de los EEUU.
Al parecer esto ya surtió efectos en el primer ministro canadiense, quien durante un congreso feminista al que fue invitado, aprovechó para calificar de “retroceso” la elección de un hombre como Trump.
Se suponía que estaríamos en una marcha constante, aunque difícil, hacia el progreso. Y aún así, hace pocas semanas, Estados Unidos votó por segunda vez no elegir a su primera mujer presidenta. En todos los lados, los derechos de las mujeres y el progreso de las mujeres están bajo ataque, de forma abierta o sutilmente. Quiero que sepan que soy y siempre seré un orgulloso feminista. Siempre tendrán en mí y en mi Gobierno un aliado”, declaró Trudeau.
Estas palabras llegaron a oídos del empresario multimillonario e impulsor de la última campaña presidencial de Trump, Elon Musk, que no tardó en reaccionar ante los comentarios del canadiense.
En una publicación del académico conservador canadiense Gad Saad, en la red social X, Elon Musk aprovechó para expresar su opinión acerca del progresista Justin Trudeau.
Es un estúpido insufrible. No le queda mucho tiempo en el poder”, escribió Elon Musk.
Trudeau enfrenta en su país una creciente oposición liderada por la derecha conservadora, quienes han remontado espacios en la discusión mediática y mermado en la popularidad del primer ministro. Según los más recientes sondeos, el Partido Conservador (PC) ha logrado rebasar en intención de voto al partido de Trudeau por 20 puntos. Las elecciones en Canadá serán en octubre de 2025, sino es que los conservadores logran adelantarlas mediante una moción de censura.
