El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, respondió con firmeza a las críticas vertidas por Mike Pompeo, exsecretario de Estado de Estados Unidos bajo la administración de Donald Trump. Pompeo había afirmado que las reformas impulsadas por López Obrador, en particular la del Poder Judicial, serían perjudiciales para México y afectarían negativamente las relaciones con Estados Unidos.
“Es natural que él opine eso”, comentó López Obrador en su conferencia mañanera del lunes 24 de junio en Palacio Nacional. “Respetamos su punto de vista, aunque no lo compartimos. Entendemos que en Estados Unidos están viviendo una situación especial con las próximas elecciones en noviembre y que eso puede influir en sus declaraciones”.
El presidente mexicano señaló que “están muy mal acostumbrados a meter las narices en todos lados” y subrayó que la reforma al Poder Judicial “no afecta en nada” al ser cuestionado sobre si podría beneficiar al narcotráfico. “Cada vez que hay elecciones, las pasiones se desbordan, lo acabamos de ver”, añadió López Obrador, también lanzando una crítica hacia los medios de comunicación en México.
López Obrador aprovechó la ocasión para invitar a la audiencia a no perderse el próximo debate entre Donald Trump, quien nuevamente aspira a la presidencia de Estados Unidos, y el actual presidente Joe Biden. Aclaró que su respuesta no era un ataque personal hacia Pompeo: “Pompeo fue formado en un entorno que tiende a resolver los conflictos con el uso de la fuerza, mientras que yo fui educado con la idea de que los seres humanos no somos malos por naturaleza, sino que son las circunstancias las que a veces nos llevan por caminos equivocados”.
El presidente mexicano expresó su confianza en mantener una relación de respeto y cooperación con Estados Unidos, subrayando que las Fuerzas Armadas y la Guardia Nacional de México están trabajando activamente en la lucha contra el narcotráfico. “Nuestro gobierno no tiene vínculos con la delincuencia, lo cual es fundamental para combatir el tráfico de drogas”, concluyó López Obrador.