En una declaración contundente, el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, denunció el ataque perpetrado por presuntos normalistas de Ayotzinapa contra Palacio Nacional como “un acto de provocación”. Durante la conferencia matutina, López Obrador expresó su preocupación ante este hecho, calificándolo como un intento deliberado de buscar la represión por parte del gobierno federal.
“Los hechos ocurridos ayer fueron diseñados para provocar una respuesta violenta por parte de las autoridades, con el fin de poder acusarnos de represores, todo esto en vísperas de las elecciones”, afirmó el mandatario. Asimismo, destacó que el gobierno ya tiene identificados a los responsables del ataque, señalando que buscarán utilizar cualquier pretexto para atacar a la administración en funciones.
El presidente expresó su agradecimiento a los policías capitalinos que resultaron heridos en el incidente, destacando que, afortunadamente, las heridas fueron leves. Confirmó que un total de 26 elementos resultaron heridos y están en proceso de recuperación.
El ataque, que tuvo lugar tras un mitin en el zócalo de la Ciudad de México, consistió en el lanzamiento de petardos contra la fachada del emblemático Palacio Nacional. López Obrador dejó entrever la posibilidad de que los responsables del acto no fueran ni maestros ni estudiantes, insinuando la intervención de terceros interesados en desestabilizar al gobierno.
