Carlos Sainz consiguió terminar con la racha de Red Bull y ganó este sábado 23 de marzo el Gran Premio de Australia ante todo pronóstico.
El piloto español superó las expectativas y a pesar de haber sido operado hace dos semanas por apendicitis, subió al podio de Melbourne para festejar su primera victoria de la temporada.
Checo Pérez sufrió para mantener el ritmo y terminó en la quinta posición de la carra, recordando que la FIA lo penalizó el día de ayer y arrancó sexto en la parrilla.
Charles Leclerc firmó el 1-2 para Ferrari, algo que no había ocurrido en la campaña gracias al brutal dominio que ha caracterizado a la escudería austriaca.
Entre las grandes sorpresas, Max Verstappen y Lewis Hamilton se retiraron del circuito después de presentar problemas en sus respectivos autos.