La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, lanzó un contundente llamado para transformar el Poder Judicial del país y establecer un verdadero Estado de derecho.
Desde su conferencia matutina, la mandataria aseguró que actualmente el sistema de justicia “no es garantía de justicia”, pues está “capturado por muchos intereses y esquemas de corrupción”.
Sheinbaum recalcó que su administración no busca que el nuevo Poder Judicial responda a la figura presidencial, sino que funcione de forma autónoma y con apego a la legalidad. “No queremos que le haga caso a la presidenta, queremos que establezca un Estado de derecho”, declaró. Añadió que “hay jueces honestos”, pero el sistema está “basado en grupos de interés” que impiden una justicia imparcial.
Una de las principales preocupaciones expuestas por Sheinbaum es el uso del sistema judicial para evadir responsabilidades fiscales.
“Hay un grupo empresarial que lleva 16 años litigando para no pagar impuestos”, denunció, y sostuvo que este tipo de casos deben resolverse con base en la ley, sin privilegios derivados del poder económico.
Además, criticó el uso indebido del sistema judicial para liberar delincuentes y permitir el lavado de dinero, e hizo un llamado a que los delitos de cuello blanco también sean juzgados sin excepciones: “Que no porque alguien tenga dinero compre jueces y no pase la justicia”.
Ante los cuestionamientos sobre la imparcialidad de futuros ministros que simpatizan con la Cuarta Transformación, la presidenta subrayó que la participación política no excluye la ciudadanía ni la legitimidad, y recordó que algunos ministros actuales también han tenido vínculos con partidos de oposición.
“Lo que queremos es que no haya vínculos de intereses que impidan que el pueblo reciba lo que debe por el pago de impuestos”.
Sheinbaum también defendió el derecho de réplica frente a lo que calificó como “retahíla de críticas mentirosas”, incluyendo burlas con inteligencia artificial. Aseguró que su gobierno trabaja para garantizar el derecho de las audiencias y una comunicación justa con la ciudadanía.
Finalmente, llamó a confiar en el nuevo presidente del Poder Judicial, de quien dijo no haber recomendado ni influido, pero reconoció como una figura que debe actuar con independencia. “Lo que buscamos es que la nueva Corte sea un verdadero guardián de la justicia para todos: ricos, pobres, pueblos indígenas, personas extranjeras, todos en el marco de nuestras leyes”.
“Vamos a construir un Estado de derecho”, concluyó, “no el Estado de chueco que existía”.
