Esta tarde el Congreso de la Ciudad de México aprobó fijar un tope al aumento de las rentas de viviendas en la capital del país.
Con 57 votos a favor, ni uno en contra y sin abstenciones, los legisladores locales determinaron que los incrementos en las rentas no podrán ser mayores a la inflación reportada por el Banco de México el año anterior al del aumento.
Se trata de una iniciativa impulsada por el grupo parlamentario de morena, por el jefe de Gobierno Martí Batres y por la sociedad civil organizada, quienes demandaban desde hace tiempo un control a los arrendadores de bienes inmuebles.
Además del tope en el aumento de rentas, el Congreso capitalino aprobó la creación de un Registro Digital de Contratos de Arrendamiento, a cargo del Gobierno de la CDMX. El arrendador deberá registrar sus contratos en un plazo no mayor a 30 días después de haber generado el documento, el registro será inmediato por parte del gobierno.
También se dictaminó que el Gobierno de la CDMX construya vivienda social, que pueda ser otorgada a la población más vulnerada, como trabajadores con un nivel de ingresos bajo, madres solteras y personas jóvenes entre 18 y 35 años de edad. La vivienda será ofertada a través de un esquema de créditos asequibles, mucho más baratos que las tradicionales hipotecas.