Lionel Messi y el Inter Miami provocaron la furia de los aficionados en China, luego de la ausencia del astro argentino en un partido amistoso programado para este domingo 4 de febrero.
Los fanáticos que se dieron cita en el Estadio Hong Kong con la ilusión de ver al astro argentino en acción, jamás imaginaron lo que estaría por ocurrir.
El campeón del mundo con la Selección Argentina decidió no salir a la cancha, quedándose como espectador en el banquillo de Las Garzas durante todo el encuentro.
Por si fuera poco, el gobierno de Hong Kong le pidió a La Pulga interactuar con el público, sin embargo, el atacante de 36 años de edad se negó a ello.
David Beckham tuvo que salir a intentar calmar las aguas, explicando que Messi tenía una molestia y que no querían ponerlo en peligro, ‘excusa’ que nadie creyó al final.