En una sorpresiva decisión, Diego Martín Cocca ha sido destituido de su cargo como director técnico de la Selección Nacional de México, convirtiéndose en uno de los períodos más breves en la historia del Tri para un entrenador encargado de construir un proceso mundialista. El argentino fue seleccionado por Rodrigo Ares de Parga como nuevo entrenador el 10 de febrero, pero su mandato duró apenas cuatro meses y nueve días. Juan Carlos Rodríguez, Comisionado de la Federación Mexicana de Fútbol y nuevo líder del organismo, anunció oficialmente la noticia a través de las redes sociales de la Federación.
Rodríguez reveló que el periodo de Cocca llegó a su fin a pesar de que el equipo se encuentra en preparación para la Copa Oro. Esta decisión se suma a la destitución de Rodrigo Ares de Parga como Director de Selecciones Nacionales. El Comisionado lamentó las deficiencias en la toma de decisiones, la falta de procesos, rigurosidad y transparencia en los nombramientos, así como los malos hábitos arrastrados durante años. Aunque lo más natural sería esperar hasta que concluya la Copa Oro, el tiempo es un factor que no se puede desperdiciar.
El breve periodo de Diego Cocca al frente del Tri estuvo marcado en gran medida por la contundente derrota ante Estados Unidos en las semifinales de la Liga de Naciones de la Concacaf, donde el equipo mexicano cayó 3-0 sin mostrar un buen fútbol, a pesar de contar con varios jugadores que militan en clubes europeos. En un video publicado por la Federación Mexicana de Fútbol, Juan Carlos Rodríguez informó a los aficionados sobre los cambios realizados como parte de la reestructuración del equipo.
Durante su corto período al mando de la selección, Diego Cocca dirigió solo 7 partidos, con un saldo de 3 victorias, 3 empates y 1 derrota ante Estados Unidos. Rodríguez expresó su preocupación por las deficiencias en la planificación, logística y funcionamiento, así como la falta de liderazgo en varios niveles. El partido contra Estados Unidos pudo haberse perdido, lo cual es un riesgo siempre presente en el fútbol, pero lo inaceptable fue la forma en que sucedió, con decisiones logísticas que generaron fricción dentro del equipo.
Además, Rodríguez señaló que el resultado del partido contra Estados Unidos pasa a un segundo plano, ya que el equipo perdió en aspectos como el liderazgo y el control emocional. La derrota no solo afectó el juego en sí, sino también la capacidad de reacción, el liderazgo dentro y fuera del campo, el control emocional y la representatividad de la camiseta. Rodríguez manifestó su preocupación por la posible falta de compromiso de algunos jugadores antes de iniciar la Copa.